László József Bíró… el creador del bolígrafo

László József Bíró… el creador del bolígrafo

Te has preguntado alguna vez ¿Quién inventó el bolígrafo que utiliza a diario? Pues hoy te presentaremos a László József Bíró, fue él quien inventó el bolígrafo. Sí, así, como lo conocemos en la actualidad.

László Bíró nació en el 1899 en la ciudad de Budapest en Hungría. Llegó a trabajar como el editor de periódicos húngaros como Hongrie-Magyarország. Y uno de sus principales problemas era que, al escribir en su trabajo, la tinta de la estilográfica tenía un secado muy lento. Esto siempre ocasionaba manchas. A raíz de la reiteración de estos inconvenientes, se percató que el tipo de tinta que utilizaban los equipos de impresión para el periódico, tenían un tiempo de secado bastante rápido y, además, no manchaba.

Así que, viendo esto, Bíró intentó llenar el depósito de su pluma estilográfica con la tinta para impresión del periódico, para probar si podía escribir con ella. Pues, no resultó. La tinta para la impresión de periódico tenía una alta viscosidad y producía atascos en la pluma. Pero, Bíró concluyó que, la tinta seguía siendo muy buena para escribir, la pluma era el instrumento que debía cambiarse.

» Los dos hermanos Bíró iniciaron la investigación y el ensayo de pruebas para tratar de inventar una nueva pluma. Y llegaron a su objetivo, consiguieron crear el instrumento perfecto para la escritura con tinta. «

El primer bolígrafo

En el año 1888, en Massachusetts, John J. Loud creó el primer modelo de bolígrafo y patentó su invención. Este bolígrafo poseía una esfera metálica, un poco grande, en su punta. El objetivo de este instrumento era utilizarse en las superficies donde una clásica pluma de tinta no se pudiere utilizar. Teniendo una mayor exactitud, el bolígrafo estaba ideado para escribir sobre el cuero. Pero, realmente, este modelo no se encontraba apto para la escritura, y comercialmente no tuvo ningún valor. Así que, el registro de la patente se venció al pasar el tiempo.

Inspiración y creación de László Bíró

László Bíró, junto a György, su hermano, quién era especialista químico, tomaron como inspiración la idea formulada por Loud. Los dos hermanos Bíró iniciaron la investigación y el ensayo de pruebas para tratar de inventar una nueva pluma. Y llegaron a su objetivo, consiguieron crear el instrumento perfecto para la escritura con tinta. Éste poseía un especial sistema de engarce de la bola, por medio de una pequeña esfera, además se complementaba con una nueva tinta bastante viscosa. Todo el mecanismo creado, servía de control al flujo de la tinta y  a la vez imposibilitaba que pudiera secarse la tinta dentro del instrumento.

Uno de las grandes invenciones del sistema del nuevo bolígrafo, se basaba en la colocación de la bola. Puesto que, la bola era insertada en una especie de engaste, exactamente en su punta. Y de igual modo la bola podía girar con total libertad mientras se impregnaba de tinta y dejaba trazos de línea sobre la superficie.

hermanos Bíró

La nueva pluma de los hermanos Bíró fue presentada en el 1931 durante la Feria Internacional en Budapest. Luego hicieron el registro de la patente en el año 1938

Birome

Los hermanos Bíró eran judíos por lo que, en el 1941, iniciando la Segunda Guerra Mundial, ellos y su amigo Juan Jorge Meyne tuvieron que huir hacia Argentina. Y fue ahí donde crearon la compañía Bíró Pens, registrando la patente en el 1943. Esta empresa, radicada en Argentina, comercializó el nuevo bolígrafo con el nombre “Birome”. Una mezcla de Bíró y Meyne.

Bíró Pens tuvo tanto éxito, que actualmente en Argentina se les llama Birome a los bolígrafos

Fama Internacional

No habiéndose terminado la Segunda Guerra Mundial, la empresa Bíró Pens tuvo su primer contrato internacional, catapultándose al mundo. Este contrato provino de Reino Unido, pues querían comprar una buena cantidad de bolígrafos para utilizarlos en los aviones.

Y así fue, los bolígrafos fueron utilizados por la tripulación de la Fuerza Aérea Real. Antes de ello constataron que los Birome funcionaran a una gran altitud sin que sufrieran derrames, algo que ocurría con las estilográficas.

Luego, en el 1950, el fabricante Marcel Bich, oriundo de Francia, negoció con Bíró y le compró la patente del famoso bolígrafo. De inmediato este bolígrafo se tornó en el principal producto de la Compañía Bic.

László Bíró murió en el 1985 en la ciudad de Buenos Aires. Y es en su cumpleaños, el 29 de septiembre, que en Argentina se celebra como el Día del Inventor.  

Yolena