El Subrayador: Un rotulador con tinta al agua

Hoy hemos querido llevarte a un recorrido por la historia del Subrayador, por su origen y evolución. Además, realizamos un detallado análisis de este valioso instrumento para marcar textos, explicándote el por qué de sus vivos colores o las formas más usuales en que se comercializan.

El subrayador es también un rotulador, pero con la diferencia que su tinta es al agua y se utiliza solo en el marcaje de texto o información que deseamos resaltar. Por este motivo, también se le denomina marcatextos, destacador o resaltador. Su tinta es de llamativos y translúcidos colores, lo que permite marcar o reslatar el texto sin que se oculte. Uno de sus mayores usos es en el ámbito del estudio, pues nos sirve como método nemotécnico para afianzar los partes más importantes del texto para memorizarlas.  

Otro de los usos que se le da al subrayador, es para realizar anotaciones. Aunque, el principal uso del subrayador es otorgarle formato al texto. El empleo de los colores, dependerá de la técnica que cada uno utilicemos al estudiar. Al usar diversos colores en el material de estudio, tendremos la capacidad de crear nuestro propio código tanto para clasificar importancias como la clasificar los fragmentos en las temáticas deseadas. Realmente el subrayador es un instrumento muy útil en el estudio, pues la clasificación o la asignación importancia que hagamos a través del marcado, nos ayudará a asimilar cada idea de una rápida y mejor forma.

«El subrayador es también un rotulador, pero con la diferencia que su tinta es al agua y se utiliza solo en el marcaje de texto o información que deseamos resaltar. «

El Origen del Subrayador

El Subrayador o resaltador, como queramos llamarlo, tiene el mismo origen que el tradicional rotulador. Solo que, en la línea de evolución del rotulador, se dio una bifurcación en el año 1962, cuando Yukio Horie creó el primer subrayador en la Tokyo Stationery Company

Este rotulador de tinta al agua, realmente no se había diseñado para hacer resaltar los textos, pero, sin duda alguna fua la base que sirvió de inspiración a la empresa Carter’s Ink Company. Y en el 1963 Carter’s Ink inició la producción de rotuladores con tinta de agua agregándoles el efecto de semitransparencia, llamándose Hi-Liter y trabajaban mediante acción capilar. Éstos, si fueron los precursores de los actuales subrayadores.

Desarrollo del Subrayador

Luego de la creación del Hi-Liter en el 1963, le siguió otra gran revolución en el año 1978. Pues, en esa fecha, Dennison Company, actualmente denominada Avery Dennison Corporation, adquirió a la empresa Carter’s Ink., desatándose una producción de subrayadores pero con los colores fluorescentes.

Ya durante la década de los años 80, se reemplazó la punta de fieltro por la bolita de polietileno, haciendo las veces de un cabezal con porosidad. Este cambio tuvo sus ventajas, ya que se aminoraba el desagradable ruido cuando se escribía y la tinta podía fluir con mayor uniformidad.

Pero, como pasa habitualmente con los productos que se comercializan, los subrayadores iniciales no fueron recibidos por el público como se esperaba, pues las personas preferían seguir utilizando los bolígrafos. Se resistían a utilizar los resaltadores. Así que los fabricantes decidieron volver a innovar el modelo, convirtiéndolos en subrayadores luminosos y con punta doble. De esta forma atrajeron a los compradores.

Los resaltadores o subrayadores tienen un puesto esencial en los textos. Antes de su llegada, las partes del texto que debían ser resaltadas, se marcaban utilizando la misma herramienta con la que se escribía. Pero, el texto se volvía ilegible, y la pulcritud se alteraba, pues, el mismo se llenaba de símbolos o líneas dibujadas por el usuario. En cambio, los subrayadores tuvieron un efecto maravilloso, ya que el texto se volvió más legible y las partes resaltadas se encuentran rápida y fácilmente.

Algunos datos importantes del Subrayador o Resaltador

• Los resaltadores presentan una gran diversidad de modelos, donde varían grandemente sus colores y formas. El color más común es el amarillo fluorescente, que siendo el más claro, no afecta tanto el texto y no aparece al fotocopiar el texto subrayado. El resaltador más vendido es el de color amarillo, siguiéndole el de color rosa, representando el 85% de sus ventas. Aunque, menos usados, también conseguimos subrayadores de color naranja, violeta, verde, rojo y azul.
• Los subrayadores poseen un color llamativo en su tinta, siendo su causa algunas de las sustancias que contiene, como la piranina, en el caso de la tinta amarilla, o las rodaminas para los demás colores. Como sabemos, los resaltadores se utilizan bastante en el campo académico, pero también se utilizan en el ámbito de los laboratorios. Por ejemplo, la piranina es un indicador del PH, mientras que las rodaninas se utiliza en la coloración de los rayos láser.  
• Los marcatextos presentan diversas formas. Como ejemplo, podemos poner los trilighters, un subrayador que posee una configuración triangular, trayendo un color diferente en la punta de cada uno de los vértices. Existen marcatextos que nos ofrecen un trazo semejante a la que deja un pastel óleo, algo muy similar a la cera. Otros subrayadores no utilizan tinta, dejando como marca una delgada cinta, siendo más fácil su eliminación en comparación con la tradicional tinta. En el mercado también existen resaltadores con una tinta especial que no traspasa el papel ligero. Sirven para el marcado de textos como la Biblia.  
• Normalmente, este tipo de rotulador poseen una punta gruesa, siendo los más buscados lo que tiene una punta biselada, ya que facilita el subrayado. Para su correcto funcionamiento y mantenimiento, es de suma importancia su capuchón o tapón, porque imposibilita el secado de la tinta.  
• El marcado o resalte del texto se ha vuelto tan común, que ha pasado del texto en físico al texto en formato digital. Así que, la webs y herramientas como Microsoft Office u Open Office nos brindan la opción del resaltado. Realmente, el remarcado de palabras o conceptos se ha vuelto una practica necesaria en el procesamiento del texto.

¿Tu subrayador se ha secado? Sigue estos consejos para arreglarlo

El subrayador posee una tinta al agua, así que, al guardarlo con el capuchón mal puesto o sin él, esta tinta se secará. Pero, si te sucede esto, lo que debes hacer es agregarle líquido. Claro, debes cerciorarte que aún tenga tinta en su depósito. Solo debes seguir estos sencillos pasos:

• Debes llenar el tapón del rotulador con alcohol. El tapón debe estar limpio.
• Ahora, sumerges la punta del subrayador dentro del tapón, durante un máximo de 5 segundos. No sobrepases este tiempo.
• Llegado los 5 segundos, sacas el subrayador e inmediatamente sostenlo con su punta mirando hacia arriba. De esta forma el alcohol penetrará el fieltro y la tinta seca se disolverá.
• Luego, coloca de nuevo el resaltador con su punta dirigida hacia abajo. Envuelve la punta con papel absorbente, aproximadamente 30 segundos, para quitar el exceso del líquido.
• Ya está listo tu resaltador. Ahora, solo debes probar tu subrayador sobre una hoja de papel. Si no funciona, debes repetir el proceso.
• Como la tinta que poseen los subrayadores es al agua, puedes utilizar agua tibia si no tienes a la mano el alcohol desinfectante. Aunque el agua funcionaría en un grado menor.