Lewis Waterman… el creador de la actual pluma estilográfica

Lewis Waterman… el creador de la actual pluma estilográfica

La Plumilla como instrumento de escritura ha tenido una larga evolución en el tiempo. Donde han sido varias las personas que llegaron a aportar sus nuevos diseños o mejoras a tan valiosa herramienta. Pero hoy conoceremos a Lewis Edson Waterman, quien inventó la Pluma estilográfica con sistemas de alimentación por medio de la acción capilar. Es decir, que conoceremos al inventor de la plumilla actual. Lewis, además fundó las empresas: Ideal Pen Company y la Waterman Pen Company.

Sobre los primeros años de Lewis se conoce muy poco. Pero se sabe que nació en Nueva York un 18 de noviembre del 1837. Llegó a desempeñarse como instructor en la taquigrafía, como agente de seguros y también vendía libros.

» Las plumas iniciales que fabricó Waterman se encontraban fabricadas con caucho duro y los plumines eran de oro (14 quilates). Algunas de aquellas plumas se pueden conseguir en la actualidad.»

Hay una Leyenda

Existe una leyenda de lo que llevó a Lewis a mejorar la plumilla existente en su época. Y aunque, en realidad solo es eso, se las contaremos. Pues, esta historia dice que, en su último trabajo como agente de seguros estaba cerrando la firma del contrato con cierto cliente. Pero la pluma estilográfica que tenían se dañó, y toda la tinta se derramó sobre las hojas del contrato. La leyenda sigue contando, que mientras Waterman buscó un contrato nuevo, dicho cliente firmó el seguro con un agente diferente. Así que, Lewis perdió su venta.

Verdadero motivo

La leyenda anterior no es verdad. Pero lo que sí es cierto es que Waterman, en el 1883, mejoró el sistema de la pluma estilográfica que existía en esa época.

La verdad es que Lewis se percató que las plumas de su tiempo, no tenían la capacidad de controlar el flujo de la tinta. Y que esto causaba constantes fugas y muchos accidentes. Así que decide unirse con su hermano llamado Elijah, para iniciar los experimentos con diversos tubos de respiración que sirvieran de depósito.

Descubrimiento

Lewis y Elijah llegaron a descubrir que, al dejar ingresar el aire por medio de tubos capilares, al suministro de tinta, ésta podrá fluir muy lentamente hacia afuera del depósito gracias a la fuerza de gravedad. Así no se causarían las fugas desagradables. Los tubos capilares, no era más que unos tubos tan estrechos que se asemejan a los vasos sanguíneos más pequeños.

La venta

En el año 1884, un 12 de febrero, Lewis Waterman registró la patente de su pluma estilográfica. Inicialmente eran fabricadas por él, para venderlas tras una tienda de cigarrillos. A sus clientes les garantizaba por 5 años, el funcionamiento de su invento.

Un año después, en el 1885, Waterman llegó a asociarse con Asa Shipman, fundando así la  “Ideal Pen Company”. Aunque compañía duró poco, así que, lo intentó nuevamente por su cuenta. Reunió capital y en el 1887 logró fundar en  la empresa “Waterman Pen Company”.

Nuevas modificaciones

Waterman observó que su diseño presentaba un problema, ya que al encontrarse casi sin tinta, se creaba una burbuja. Por esto, en el 1899 realizó una serie de modificaciones al diseño y resolvió el problema. Fabricó unas bolsas de desbordamiento hacia cada lado de los canales que servían de alimentación.

Las invenciones de Waterman no se centraron solo en las estilográficas. Uno de sus muy reconocidos logros es la creación del método para la conservación y concentración del zumo de la uva.

El éxito

Waterman se encontraba totalmente convencido de la fiabilidad del producto que había creado. Y tenía toda la razón para estarlo. El Diseño que había creado era completamente seguro, y por esto mantenía una política muy estricta para cualquier devolución.

Su compañía despegó con éxito y los pedidos de la pluma estilográfica con sistema de alimentación por medio de la acción capilar, empezaron a llegar desde casi todo su país y también desde el extranjero. Era tanto el éxito de la empresa de Waterman que, finalizando el siglo XIX, llegó a fabricar siete plumas por cada diez que se veían en el comercio. Y a medida que el negocio creció, tuvo que trasladar su producción.

Fue tanta la fama de Waterman Pen Comany, que fue llamada a exponer en la honorífica Exposition Universelle’ de París, en el año 1900.

Lewis Waterman murió en el año 1901. Momento en el cual Frank D. Waterman, su sobrino, comenzó a hacerse cargo de la empresa.  Frank inicio una gran expansión, logrando incrementar las ventas a la gran cifra de 350.000 plumas por año. Pero, a pasar el tiempo, las ventas de la empresa empezaron a descender, además, fabricantes como Sheaffer y Parker entraron al ruedo del mercado.

Llegado el 1954, la Waterman pen Company cerró sus puertas, dejando atrás años de gran lucha. Logrando solo sobrevivir la Waterman Jif, la empresa filial de Waterman en Francia, para aboserber lo que quedó de la compañía en Estados Unidos y también en Reino Unido. Luego se conocería como Waterman S.A.

En el 2001, Waterman S.A. la adquirió Sanford, convirtiéndose en otra división de la Newell Rubbermaid, dueña a su vez de la Parker Pen Company.

Las plumas iniciales que fabricó Waterman se encontraban fabricadas con caucho duro y los plumines eran de oro (14 quilates). Algunas de aquellas plumas se pueden conseguir en la actualidad. Son muy apreciadas, tenían una alta calidad, además eran muy suaves y flexibles.

Yolena